El pasado 23 de diciembre, en un acto celebrado en el auditorio de la Universidad Politécnica y Artística del Paraguay (UPAP), el Prof. Dr. Manuel de Jesús Viedma, Rector de la institución, recibió una distinción de alto reconocimiento tanto académico como internacional. En un evento solemne, Viedma fue nombrado Miembro Honorario de la Academia de la Historia y de la Geografía Militar del Paraguay, en una ceremonia que destacó la importancia de su contribución al mundo académico y a la historia nacional.
Durante el acto, se entregaron medallas de distinción de la Fundación Virgen Inmaculada del Alcázar de Toledo a figuras de gran relevancia, como el Ex Presidente de la República y Senador Vitalicio, Ing. Juan Carlos Wasmosy, y el Presidente de la Academia de la Historia y de la Geografía Militar del Paraguay, Escribano Juan José Benítez Rickmann, además del propio Prof. Dr. Viedma.
El evento comenzó con la interpretación del himno nacional paraguayo y español, para dar paso al discurso del presidente de la Academia, Juan José Benítez Rickmann, quien expresó su agradecimiento a los presentes, destacando la presencia del expresidente de Ecuador, Licenciado Lenín Moreno, y el expresidente de Paraguay, Juan Carlos Wasmosy, así como otros invitados de honor.
Designación de Académico Honorario
El reconocimiento como Académico Honorario fue otorgado a Viedma por su notable labor educativa y su compromiso con el desarrollo del país. En su discurso, Viedma destacó su vocación por la educación y la formación de futuros líderes que puedan contribuir al mejoramiento de Paraguay. “Estamos unidos, y ojalá que podamos avanzar para dejar en la mente de los jóvenes el deseo de mejorar este país, en todas las profesiones. Está en sus manos el futuro de Paraguay,” expresó, haciendo un llamado a la unidad y el esfuerzo colectivo.
El Prof. Dr. Viedma prestó juramento como Académico Honorario, y en su alocución, también rindió homenaje al pintor paraguayo Aurelio García Corvalán, destacando su contribución al arte nacional.
Hermandad con la Historia
El Dr. Antonio Rivas, en representación de la Fundación Virgen Inmaculada del Alcázar de Toledo, habló sobre la importancia simbólica de la Hermandad, recordando que fue fundada en plena Guerra Civil Española, en 1936. La Hermandad es un símbolo de la resistencia y la fe, siendo un referente para los pueblos que comparten los valores de fraternidad y esperanza.
Rivas expresó su agradecimiento a las autoridades presentes, en especial a Viedma, por su hospitalidad, y a Wasmosy por su apoyo a la causa de la Hermandad. Posteriormente, entregó las medallas de la Hermandad Nuestra Señora del Alcázar de Toledo al Prof. Dr. Viedma, al presidente Benítez Rickmann y al expresidente Wasmosy, resaltando el legado de resistencia histórica representado por la figura de la Virgen María del Alcázar.
Valores como símbolo de la Virgen
En su intervención, el Ing. Juan Carlos Wasmosy, ex presidente y presidente honorario de la Academia, expresó su profundo agradecimiento por la medalla y diploma otorgados por la Fundación Virgen Inmaculada del Alcázar de Toledo. Destacó que la Hermandad es un símbolo de fe y fraternidad, reflejando los valores universales de resistencia y esperanza, que siguen siendo fundamentales para la unidad de los pueblos.
Wasmosy también reafirmó su admiración por el Prof. Dr. Viedma, agradeciendo su compromiso con la educación y la historia. “Esta medalla representa no solo un honor personal, sino también el compromiso con el legado histórico y cultural de nuestra región,” concluyó.
El evento cerró con un sentido homenaje a todos los hombres y mujeres que han hecho posible la existencia de la Hermandad y con el compromiso de seguir construyendo un futuro mejor para las generaciones venideras.
