El diputado Sebastián Remesowski desmintió categóricamente las acusaciones de persecución política formuladas por el intendente de Encarnación, Luis Yd, quien, junto a otros intendentes de la oposición, denunció en la Cámara de Diputados un supuesto hostigamiento por parte de instituciones estatales. Remesowski instó al jefe comunal a priorizar la gestión de su municipio en lugar de buscar confrontaciones políticas.
Respuesta a las denuncias
Luis Yd, intendente de Encarnación, afirmó ayer que enfrenta una persecución política orquestada desde el Gobierno, señalando a instituciones como la Fiscalía, la Contraloría General de la República, la Essap y la ANDE como herramientas de presión contra municipios opositores. Según Yd, estas acciones “perturban la democracia” al responder a mandatos políticos.
En respuesta, Remesowski rechazó estas acusaciones, calificándolas de infundadas. “A él le toca solamente gobernar. Encarnación necesita crecer, hay muchas cosas en las que él se debe concentrar, no venir a medir un termómetro político acá”, declaró el legislador a los medios. Para Remesowski, las denuncias de Yd carecen de sustento, sugiriendo que el intendente “ve fantasmas donde no hay”.
Llamado a la responsabilidad
El diputado enfatizó que los intendentes deben enfocarse en el desarrollo de sus comunidades, especialmente en una ciudad como Encarnación, que enfrenta desafíos significativos tras eventos recientes, como el derrumbe de un edificio que ha generado cuestionamientos sobre la gestión municipal. Remesowski instó a Yd a trabajar en soluciones concretas para los ciudadanos, en lugar de atribuir sus dificultades a supuestas maniobras políticas.
“Encarnación merece una gestión que priorice el progreso y no se distraiga con acusaciones sin fundamento”, afirmó el parlamentario, subrayando que las instituciones señaladas por Yd operan dentro de sus competencias legales y no bajo directrices políticas.
Contexto de las acusaciones
Las declaraciones de Remesowski se producen en un contexto de creciente tensión entre autoridades locales opositoras y el oficialismo. Los intendentes de la oposición, incluyendo a Yd, han denunciado presiones a través de cortes de servicios esenciales, como el suministro de agua por parte de la Essap, y auditorías de la Contraloría que, según ellos, tienen motivaciones políticas. Además, han cuestionado la falta de apoyo de entidades binacionales como Yacyretá e Itaipú hacia municipios no alineados con el Gobierno.
Sin embargo, Remesowski defendió la actuación de las instituciones, argumentando que las denuncias de la oposición buscan desviar la atención de problemas de gestión en sus municipios. En el caso de Encarnación, el cartismo ha solicitado a la Fiscalía y la Contraloría investigar el derrumbe de un edificio, lo que ha intensificado las críticas hacia la administración de Yd.
Polarización y gobernabilidad
El cruce de declaraciones refleja la polarización política que atraviesa el país, donde las acusaciones de persecución y las defensas institucionales marcan el debate público. Remesowski insistió en que los intendentes opositores deben asumir sus responsabilidades sin recurrir a narrativas de victimización. “El trabajo de un intendente es resolver los problemas de su gente, no generar conflictos políticos innecesarios”, concluyó.
Este episodio pone de manifiesto los retos de la convivencia política en un escenario donde las diferencias partidarias afectan la relación entre el Gobierno central y los municipios, mientras los ciudadanos esperan resultados concretos de sus autoridades locales.
