Un emotivo gesto de solidaridad y esperanza conmovió a la comunidad de Encarnación, luego de que Kevin, un joven de 22 años, fuera declarado con muerte cerebral y donara su corazón y otros órganos para salvar vidas. Este trascendental hecho marca un hito en la colaboración de instituciones médicas y de apoyo logístico en la región.
El Operativo: Un Ejemplo de Coordinación Multisectorial
La ablación de los órganos fue llevada a cabo por el equipo del Hospital Regional de Encarnación en conjunto con la Séptima Región Sanitaria, y con el respaldo del Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT) del Ministerio de Salud Pública. La Fuerza Aérea Paraguaya, la DINAC, la Patrulla Caminera y otras instituciones se unieron para garantizar el éxito del procedimiento.
Un Legado de Vida
Kevin, quien sufría de una enfermedad congénita cardiovascular que afectaba su sistema nervioso, fue declarado con muerte encefálica el lunes pasado. Su corazón, junto con córneas, riñones y médula ósea, fue trasladado a Asunción, donde los órganos fueron implantados en pacientes que esperaban una segunda oportunidad para vivir.
Uno de los receptores, también un joven de poco más de 20 años, recibió el corazón en el Hospital Cardiovascular, marcando un éxito rotundo en la operación. Otros órganos también fueron trasplantados en diferentes hospitales, cumpliendo estrictos estándares de calidad y compatibilidad.
La Ley que Facilita la Donación
Gracias a una reciente legislación en Paraguay, todos los ciudadanos son considerados donantes automáticos, salvo que manifiesten su negativa en vida o que la familia rechace el procedimiento. Esta normativa facilita y acelera los procesos de ablación y trasplante, beneficiando a numerosas personas en lista de espera.
Un Sistema de Salud Preparado
Este hecho también resalta la capacidad del sistema de salud del Departamento de Itapúa para realizar procedimientos de alta complejidad, posicionándolo como un referente en la región. Se espera que con la próxima inauguración del Gran Hospital del Sur, no solo se lleven a cabo ablaciones, sino también trasplantes en la misma región, evitando traslados y fortaleciendo la atención médica local.
Un Llamado a la Solidaridad
La historia de Kevin es un recordatorio del poder transformador de la donación de órganos. Cada gesto cuenta para salvar vidas y mejorar la calidad de vida de quienes esperan una oportunidad. La comunidad de Encarnación se enorgullece de haber sido parte de este noble acto, que inspira a otros a seguir su ejemplo.
Que su corazón siga latiendo no solo en el cuerpo de su receptor, sino también en la memoria de todos aquellos que valoran el gesto más sublime de amor al prójimo.
