ENCARNACIÓN: ESTUDIANTES DE LA UNI REVELAN EL DETERIORO DETRÁS DE LA FACHADA TURÍSTICA

Encarnación, promocionada como una joya turística del Paraguay —ordenada, limpia y encantadora—, podría no ser el paraíso que algunos insisten en vender. Un grupo de estudiantes de la Universidad Nacional de Itapúa (UNI) decidió poner a prueba esta imagen idealizada con un estudio exhaustivo que exponen una realidad menos idílica: calles plagadas de baches, paradas de autobuses en mal estado y una señalización deficiente en zonas clave.

El relevamiento, llevado a cabo hace algunos meses, abarcó la zona céntrica de la ciudad, delimitada por las avenidas Irrazabal, Caballero, Francia y Costanera República del Paraguay, junto con la calle Iturbe. En total, se analizaron 2,89 km² (289 hectáreas) mediante un mapeo digital y fotográfico que documentó el estado de más de 30 calles. Los jóvenes, armados con cámaras y herramientas de georreferenciación, se propusieron evaluar las condiciones de las vías, las paradas de autobuses y la señalización vial.

Un mapa que habla por sí solo

El resultado es un mapa digital con seis capas que desnudan la situación:

  • Límite del área estudiada.
  • Calles relevadas.
  • Más de 360 ​​baches georreferenciados y fotografiados.
  • Señalización clasificada por estado: verde (buena), naranja (dañada) y rojo (pésima o inexistente).
  • Paradas de autobuses, con imágenes de su deterioro.
  • La Estación Ómnibus de Encarnación.

Los números son elocuentes. En el corazón de la ciudad, se registraron más de 360 ​​baches de tamaño considerable —no simples grietas—, muchos concentrados en cruces y tramos críticos. «En algunos sectores tuvimos que agruparlos porque eran demasiados. Si los marcamos uno por uno, fácilmente superaríamos los 750», explicó uno de los estudiantes. Un recorrido posterior confirmó el impacto: los vehículos sufren golpes constantes al pasar por estos puntos, reflejo de años de mantenimiento insuficiente.

Paradas de autobuses: abandono a la vista

Las paradas de autobuses no corren mejor suerte. La mayoría está deteriorada, con vidrios rotos, asientos destrozados y estructuras que apenas cobijan a tres o cuatro personas. “Son incómodos y no protegen del sol o la lluvia”, señaló un integrante del equipo. Por las noches, la situación empeora: casi ninguna cuenta con iluminación propia, dejando a los usuarios a merced del alumbrado público o la luz de los comercios cercanos.

Señalización: un contraste turístico

Si bien las señales viales en el centro están en condiciones aceptables, el panorama cambia en la Costanera y el Paseo de los Teros, zonas emblemáticas para el turismo. Allí, los cruces sin marcar y las señales destruidas contradicen la narrativa de una ciudad impecable. “Es irónico que las áreas más promocionadas sean las que peor están”, comentó otro estudiante.

Más allá de la postal

“Encarnación no es la ciudad ordenada y perfecta que algunos quieren hacernos creer”, afirman los autores del estudio. Sin embargo, aclaran que su intención no es desprestigiarla, sino visibilizar problemas para impulsar soluciones. “Queremos que se actúe, no que se tape la realidad”, subrayaron.

El proyecto, liderado por Arnoldo Setrini, Sebastián Ortiz, Bruno Rodríguez, Fabrizzio Rojas y Juan Manuel Salas, estudiantes de Ingeniería de la UNI, no termina aquí. Planean actualizar el mapeo y extenderlo a más barrios, con la esperanza de que las autoridades tomen nota. Para quienes deseen explorar los datos, se recomienda abrir el mapa en una computadora o tableta.

Un llamado a la acción

Este trabajo pone en evidencia que la “Perla del Sur” enfrenta desafíos urgentes en infraestructura y servicios. Mientras algunos siguen aferrados a la imagen de postal, estos jóvenes apuestan por la verdad como primer paso hacia una ciudad que realmente merece los elogios. La pelota, ahora, está en el tejado de las autoridades.