ARMANDO JAVIER ROTELA RECIBE CONDENA DE 21 AÑOS POR NARCOTRÁFICO DESDE TACUMBÚ

Un tribunal de Sentencia sentenció de manera unánime a Armando Javier Rotela a 21 años de prisión, más 9 años adicionales como medida de seguridad, por liderar operaciones de tráfico de drogas desde la Penitenciaría Nacional de Tacumbú. El fallo, reportado por el periodista Raúl Ramírez de Última Hora, también alcanzó a otros implicados en la red criminal.

Entre los condenados se encuentran Vicente Ignacio Chase, alias «Peko» o «Petiso»; Carmen Carolina Ortiz, pareja de Chase; Christian Mario Martínez Medina, guardiacárcel de Tacumbú; y otros cómplices como Juan Javier Rodas Román, Fredy Magdaleno Pérez, Carlos Damián Fernández González y Ronald Herminio Cantero Solís. Todos fueron hallados culpables de participar en la estructura delictiva.

La investigación, que se inició en 2021 durante la pandemia, se basó en interceptaciones telefónicas autorizadas judicialmente. Según la Fiscalía, Rotela, líder del Clan Rotela, se dirigía desde la cárcel la comercialización de estupefacientes con apoyo de guardiacárceles que facilitaban tanto el ingreso de drogas como de armas. Los fiscales Christian Ortiz y Luis Said habían solicitado la pena de 21 años de cárcel más 9 de medidas de seguridad, solicitud que el tribunal acogió en su totalidad.

Rotela, por su parte, se defendió alegando falta de pruebas materiales: «No me encontraron drogas ni celulares», afirmó, insistiendo en que no había evidencia sólida en su contra. Sin embargo, el tribunal desestimó sus argumentos y ratificó la condena.

Este no es el primer revés judicial para Rotela. En abril de 2024, una jueza unificó dos condenas previas, estableciendo una pena de 23 años de cárcel y 8 años de medidas de seguridad, derivadas de sentencias por 19 y 8 años de prisión. Con aquella resolución, su reclusión se extendería hasta 2046. La nueva condena refuerza su situación legal y evidencia la persistencia de su actividad criminal desde el encierro.

El caso expone las fallas del sistema penitenciario y la capacidad de Rotela para mantener el control del Clan Rotela, incluso tras las rejas, utilizando a cómplices dentro y fuera de Tacumbú para sostener su red de narcotráfico.