Adriana Meza, vecina de Encarnación, se encuentra en una situación de desesperación debido a la falta de respuestas del Ejecutivo municipal sobre el ‘carneo’ de su vehículo, un caso que ha desatado gran controversia en la comunidad. La mujer, quien adquirió su auto por un valor de 17 millones de guaraníes, asegura que su vehículo fue saqueado durante el proceso de retención en el corralón de la ciudad, y ahora enfrenta la dificultad de obtener una solución efectiva.
Según Meza, su vehículo fue sustraído de manera ilícita, lo que no solo le ha causado una pérdida económica considerable, sino también un perjuicio en su calidad de vida. «Hoy miro en las redes sociales y veo que el valor de mi auto ha aumentado, pero eso no me sirve. Yo compré un vehículo que estaba en perfectas condiciones y ahora ni siquiera me lo quieren devolver», expresó en una entrevista reciente. La ciudadana reclama que el Ejecutivo municipal, encabezado por el intendente, es el único responsable de esta situación y debe ofrecer una solución que pase por la reposición del auto o la entrega de un vehículo similar en valor y condiciones.
Adriana asegura que ha intentado diversas formas de comunicación con la Municipalidad de Encarnación, pero hasta el momento no ha recibido ninguna respuesta satisfactoria. «El intendente tiene la lapicera, él es el responsable de esta situación. Si no fue él el que robó mi vehículo, entonces debe al menos responder por lo sucedido», agregó, visibilizando su malestar ante la falta de acción por parte de las autoridades municipales.
La situación no solo ha afectado a Meza, sino que también ha generado un fuerte malestar en la comunidad, que ha mostrado su apoyo a través de comentarios en medios y redes sociales, condenando el saqueo y exigiendo una pronta resolución. «La gente está esperando una respuesta, y el respeto a los encarnacenos debe prevalecer», comentó Adriana, quien aseguró que, si la situación persiste, está dispuesta a tomar medidas más drásticas como encadenarse frente a la Municipalidad para exigir que le devuelvan su auto.
A lo largo de su reclamo, Meza ha recurrido a la movilización pública y a la presión social para llamar la atención sobre lo que considera un abuso de poder y una violación de sus derechos como ciudadana. «Voy a seguir con mis acciones. No estoy pidiendo algo ilegal, solo lo que me corresponde. Mi auto es mío, y tengo el derecho de reclamarlo», concluyó.
Con esta situación aún sin solución, la ciudadanía sigue pendiente del desarrollo de los hechos y de una respuesta oficial por parte de las autoridades municipales, quienes aún no han emitido declaraciones al respecto. Mientras tanto, Adriana Meza continúa su lucha por recuperar lo que considera un derecho legítimo y justo.
