En un contexto de creciente tensión geopolítica, Ucrania ha lanzado una fuerte advertencia sobre las implicaciones del posible despliegue de tropas norcoreanas para apoyar al Ejército ruso en la guerra en curso. Andri Sibiga, el canciller ucraniano, expresó su preocupación tras los informes de la inteligencia surcoreana que sugieren que el régimen de Kim Jong-un ha ordenado el envío de 12.000 soldados para colaborar con las fuerzas de Vladimir Putin.
Durante una rueda de prensa en Kiev, Sibiga afirmó que la participación de las tropas norcoreanas representa una «enorme amenaza» que podría intensificar y extender el conflicto más allá de los límites actuales. «La creciente implicación norcoreana supone una enorme amenaza de una mayor escalada de la guerra de Rusia contra Ucrania», subrayó el canciller.
Este alarmante desarrollo se produce en medio de un fortalecimiento de las relaciones entre los regímenes de Rusia y Corea del Norte. El Servicio Nacional de Inteligencia surcoreano (NIS) reveló que Corea del Norte habría decidido enviar a 12.000 efectivos de cuatro brigadas diferentes, incluyendo fuerzas especiales, al frente ucraniano. Este despliegue ya estaría en marcha, según fuentes citadas por la agencia de noticias Yonhap.
La advertencia de Ucrania se suma a las voces internacionales que han expresado su preocupación por el aumento de la colaboración militar entre Rusia y Corea del Norte, lo que podría tener repercusiones significativas en el equilibrio de poder en la región.
Mientras tanto, líderes mundiales como Joe Biden, Emmanuel Macron, Keir Starmer y Olaf Scholz han reafirmado su apoyo a Ucrania, aunque han mostrado diferencias sobre el enfoque del presidente Volodymyr Zelensky para hacer frente a esta situación crítica.
La comunidad internacional observa de cerca estos acontecimientos, ya que cualquier escalada en el conflicto podría tener consecuencias devastadoras no solo para Ucrania, sino también para la estabilidad global.