Una de las tradiciones más populares es el “Judas kái” (el Judas que se quema, en idioma guaraní), en la que muñecos de trapo repletos de fuegos artificiales y caracterizados como personajes de la política, la farándula o el deporte son víctimas de las llamas.
Esta tradición se origina desde la población católica de manera a representar a «Judas Iscariote» (quién habría sido el traidor de su maestro Jesús) y pertenece a unas de las diversas actividades que se desarrollan durante las festividades de San Juan.