El Gobierno de la República del Paraguay ha emitido un comunicado oficial en respuesta a la confirmación por parte del Gobierno de la República Federativa de Brasil sobre una orden de acción de inteligencia dirigida contra Paraguay entre junio de 2022 y marzo de 2023. La declaración brasileña, publicada en la tarde del 31 de marzo de 2025, ha generado una rápida y contundente reacción por parte de las autoridades paraguayas, quienes han anunciado una serie de medidas para abordar esta situación que consideran un agravio a la soberanía nacional.
MEDIDAS ADOPTADAS POR EL GOBIERNO PARAGUAYO
El Ejecutivo paraguayo ha detallado las acciones inmediatas tomadas tras conocerse el comunicado brasileño. En primer lugar, se ha convocado de manera urgente al embajador de Paraguay en Brasil, Juan Ángel Delgadillo, para que regrese a Asunción y proporcione un informe exhaustivo sobre los aspectos relacionados con esta operación de inteligencia. Este llamado a consultas busca esclarecer los hechos y determinar el alcance de la intervención brasileña en asuntos internos del país.
Asimismo, el embajador de Brasil en Paraguay, José Antonio Marcondes, ha sido citado por las autoridades paraguayas para que ofrezca explicaciones detalladas sobre las actividades de inteligencia llevadas a cabo por su país. Esta convocatoria refleja la intención del Gobierno de exigir transparencia y rendición de cuentas a Brasil, un socio estratégico en la región con el que Paraguay mantiene relaciones históricas y económicas significativas.

Por otro lado, el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicación (MITIC) ha iniciado una investigación exhaustiva de los eventos ocurridos entre junio de 2022 y marzo de 2023. Según el comunicado oficial, durante ese período no se registró ningún informe por parte del gobierno anterior que alertara sobre estas actividades. Esta pesquisa busca determinar si hubo omisiones o negligencias que permitieran que dichas acciones pasaran desapercibidas en su momento.
Finalmente, como medida de presión diplomática, el Gobierno paraguayo ha anunciado la suspensión de todas las negociaciones relacionadas con el Anexo C del Tratado de Itaipú, un tema clave en la agenda bilateral con Brasil. Esta decisión permanecerá en vigor hasta que las autoridades brasileñas brinden las aclaraciones necesarias y suficientes para restablecer la confianza entre ambos países.
CONTEXTO Y REPERCUSIONES
La revelación de esta operación de inteligencia ha generado tensiones en las relaciones entre Paraguay y Brasil, dos naciones que comparten una frontera extensa y una historia de cooperación, especialmente en torno a la gestión de la represa de Itaipú. El Anexo C, que regula aspectos económicos y operativos de esta hidroeléctrica binacional, ha sido un punto de negociación sensible durante años, y su suspensión añade un elemento de incertidumbre a los vínculos bilaterales.
El Gobierno paraguayo ha subrayado que estas medidas son una respuesta firme pero proporcional, enfocada en defender la soberanía y los intereses nacionales. La ciudadanía, por su parte, espera que las investigaciones y las respuestas de Brasil arrojen luz sobre las motivaciones y el alcance de la operación de inteligencia, así como sobre las posibles implicaciones para la seguridad y la estabilidad del país.
En los próximos días, se espera que los encuentros diplomáticos y los avances de la investigación interna ofrezcan mayor claridad sobre este episodio. Mientras tanto, el Gobierno de Paraguay reafirma su compromiso con la transparencia y la defensa de su integridad territorial frente a cualquier acto que pueda comprometerla.
