Su nombre es T Coronae Borealis y se trata de una nova recurrente ubicada en la constelación de Corona Borealis. Te explicamos cuándo se producirá.
La NASA ha anunciado que un sistema estelar único, situado a 3.000 años luz de distancia de la Tierra, nos dará un espectáculo celeste sin igual a lo largo de este 2024 y, que además, se podrá ver a simple vista. T Coronae Borealis, se hará visible entre marzo y septiembre de 2024, debido a una explosión de nova. No harán falta telescopios para contemplar este espectacular fenómeno cósmico, en el que T CrB se iluminará para igualar en luminosidad a la Estrella Polar, Polaris, un fenómeno resultante de una danza cósmica entre una enana blanca y una gigante roja.
En estos momentos, el sistema estelar, normalmente de magnitud +10 y, por tanto, demasiado tenue para verlo a simple vista, saltará a magnitud +2 durante el evento.
Rarezas astronómicas
T CrB es un sistema de nova recurrente, una rareza astronómica que consta de dos estrellas atrapadas en un tango gravitacional: una enana blanca y una gigante roja. La enana blanca, un remanente estelar del tamaño de la Tierra pero con una masa cercana a la de nuestro Sol, es el núcleo denso que queda de una estrella que se ha desprendido de sus capas externas. La gigante roja, una estrella en una etapa posterior de su vida que se ha expandido y enfriado, todavía quema helio en su núcleo y cuenta con una vasta y ondulante atmósfera.
Mientras orbitan entre sí, la intensa atracción gravitacional de la enana blanca extrae material (principalmente hidrógeno) de la expansiva atmósfera de la gigante roja. Este gas robado forma un disco de acreción en espiral a medida que se acerca a la enana blanca y finalmente cae sobre su superficie. Cuando se ha acumulado suficiente hidrógeno en la superficie de la enana blanca, la presión y la temperatura se disparan, provocando una explosión termonuclear que hace que el sistema brille dramáticamente. Este estallido es lo que los científicos llaman nova.
La pista, en un manuscrito
Una de las curiosidades de este próximo suceso, es que en 1866, los astrónomos se sorprendieron cuando una estrella que anteriormente requería telescopios para verla rápidamente pasó a ser la segunda más brillante en la constelación de Coronae Borealis durante semanas; un detalle que previamente aparece detallado en un manuscrito medieval que apunta a un brillo de lo que podría ser la misma estrella y de la que esperamos ver una repetición pronto, este mismo 2024. Una vez que su brillo alcance su punto máximo, debería ser visible a simple vista durante varios días y poco más de una semana con binoculares antes de que vuelva a atenuarse.
Así, Sin embargo, en 1866 y 1946, la enana blanca robó suficiente material de su compañera como para que el sistema en su conjunto se iluminara aproximadamente mil veces hasta alcanzar la tercera magnitud. Es por esto por lo que se conoce como nova recurrente. Los pares en los que esto sucede a menudo se conocen como novas recurrentes que, por lo general, explotan a intervalos regulares. T CrB explotó por última vez en 1946 y los astrónomos creen que volverá a hacerlo en los próximos meses. (Según los expertos, históricamente el CrB estalla aproximadamente cada 80 años).
¿Dónde mirar?
El comunicado de la NASA comenta hacia dónde tenemos que mirar en el cielo cuando este evento se produzca. “Mientras esperamos la nova, familiarícese con la constelación Corona Boreal, o Corona del Norte, un pequeño arco semicircular cerca de Bootes y Hércules. Aquí es donde el estallido aparecerá como una ‘nueva’ estrella brillante”.
T CrB está bastante cerca que otras novas recurrentes como V94 Coronae Australis; a 2.600 años luz, es lo suficientemente cerca como para situarla entre las 200 estrellas más brillantes durante sus dos últimos estallidos.
El profesor Bradley Schaefer de la Universidad Estatal de Luisiana proporcionó recientemente evidencia de una fecha cercana a abril de 2024 para el ‘nuevo’ estallido de la nova recurrente. Utilizó el momento de una caída de brillo previa a la erupción, en lugar de la duración del intervalo anterior, para determinar cuándo esperar el próximo evento. Otros han predicho el evento para mediados de 2025. No habrá que esperar mucho para ver si esta predicción es acertada o no.
Las novas recurrentes de nuestra galaxia
Esta nova recurrente es sólo una de las cinco en nuestra galaxia. Existen unas cuantas, como:
RS Ophiuchi: un sistema de nova recurrente bien estudiado que ha tenido estallidos registrados en 1898, 1933, 1958, 1967, 1985 y, más recientemente, en 2006. El sistema consta de una enana blanca y una gigante roja, con una período de recurrencia particularmente corto estimado en alrededor de 15 a 20 años. La interacción entre las corrientes de viento estelar de la gigante roja y la intensa gravedad de la enana blanca conduce a acumulaciones periódicas de material y posteriores fugas termonucleares.
U Scorpii (U Sco): una de las novas de recurrencia más rápida conocidas, con un período de recurrencia de aproximadamente 10 años y erupciones registradas en 1863, 1906, 1936, 1979, 1987, 1999 y 2010. Esta destaca por su rápido brillo y una disminución igualmente rápida de la luminosidad. El sistema consta de una enana blanca y una estrella masiva de la secuencia principal, con la enana blanca cerca del límite de Chandrasekhar, lo que convierte a U Sco en candidata a una potencial supernova de Tipo Ia.
CI Aquilae (CI Aql): tuvo erupciones conocidas en 1917, 1941 y 2000. El sistema comprende una enana blanca y una estrella compañera ligeramente evolucionada. Las erupciones de CI Aql son particularmente interesantes porque permiten a los astrónomos estudiar los cambios en el disco de acreción y la velocidad a la que la enana blanca acumula materia de su compañera.
Fuente: MUY Interesante