Una persona ha muerto y siete han resultado heridas tras la explosión de una furgoneta Cybertruck de Tesla en el hotel Trump de Las Vegas. El incidente ocurrió alrededor de las 8:40 a.m. hora local, en la zona destinada a los aparcacoches del establecimiento. El conductor del vehículo, quien perdió la vida en la explosión, había estacionado el vehículo antes de que este estallara sin previo aviso.
Elon Musk, CEO de Tesla, ha confirmado que la explosión fue causada por una bomba o pirotecnia de alto calibre transportada en el baúl del vehículo. A través de un mensaje en su red social X, Musk indicó que la explosión «no está relacionada con el vehículo en sí» y que «toda la telemetría del Cybertruck era normal al momento de la explosión». Además, sugirió que este suceso podría ser un acto de terrorismo.
La explosión de Las Vegas se produce horas después de un trágico atentado en Nueva Orleans, donde un vehículo atropelló a una multitud celebrando el Año Nuevo, dejando al menos 10 muertos y decenas de heridos. Tanto el vehículo implicado en el ataque de Nueva Orleans como el de Las Vegas fueron alquilados a través de la aplicación ‘Turo’. Ante la posible conexión entre ambos incidentes, el presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, ha solicitado cautela en las investigaciones, anunciando que se están buscando posibles vínculos y co-conspiradores.
La Policía de Las Vegas, bajo la dirección del sheriff Kevin McMahill, está tratando el incidente como un «potencial acto terrorista». McMahill señaló que están tomando todas las precauciones para asegurar la comunidad, mientras investigan la causa de la explosión y la posible intención detrás del acto. Además, mencionó que se están buscando posibles dispositivos secundarios en la zona, aunque no parece haber más amenazas inmediatas.
Por otro lado, el caso ha llamado la atención de expertos en automoción, quienes han señalado que los incendios de vehículos eléctricos, como los de Tesla, arden de manera diferente a los de los vehículos convencionales. La explosión, que ocurrió en una de las zonas más icónicas de Las Vegas, el Boulevard, generó una onda expansiva hacia arriba, lo que, según las autoridades, limitó los daños materiales en el área, sin llegar a romper las puertas de vidrio del hotel Trump.
El incidente se mantiene bajo investigación, con las autoridades trabajando para esclarecer las circunstancias y determinar si hubo algún intento premeditado por parte del conductor de causar la explosión. A medida que avanza la investigación, el FBI y otras agencias federales se suman a los esfuerzos para encontrar una posible relación entre los atentados en Nueva Orleans y Las Vegas.
Este suceso, aún en fase preliminar de investigación, ha generado gran preocupación y conmoción tanto a nivel nacional como internacional, dada la magnitud de los eventos ocurridos en ambos lugares y las implicaciones de seguridad que podrían derivarse. Las autoridades han instado a evitar conclusiones apresuradas mientras se siguen recolectando pruebas.
