En un operativo conjunto llevado a cabo en las primeras horas de este jueves, agentes del Departamento de Investigaciones de Itapúa, con el apoyo del Grupo Especial de Operaciones (GEO), lograron la detención de Hipólito Flores González, un hombre de 62 años que se encontraba en rebeldía tras ser condenado a siete años de prisión por los delitos de coacción sexual, violación y abuso sexual en niños. El procedimiento tuvo lugar aproximadamente a las 06:00 horas en una vivienda ubicada en la localidad de Calle G, Distrito de Trinidad, propiedad del detenido.
El allanamiento, autorizado mediante un mandamiento judicial, fue dirigido por la agente fiscal Zulma Britos, de la Unidad Penal N° 9 de la Fiscalía Regional de Encarnación, y supervisado por la jueza penal de ejecución Laura Benítez. La captura de Flores González responde a una orden judicial emitida el 18 de mayo de 2021 por la jueza de sentencia de Encarnación, Diana Arana de Uzuga, bajo el expediente AIN° 133/2021/TS.
Durante el operativo, las autoridades incautaron varios objetos en el domicilio, entre ellos una escopeta marca Maverick calibre 12 con cuatro cartuchos vivos sin percutir, una escopeta calibre 18 de fabricación casera con un cartucho vivo y un teléfono celular Samsung de color negro. Estos elementos fueron puestos bajo custodia como indicios relevantes para la investigación.
Según el relato oficial, el procedimiento se desarrolló tras trabajos de inteligencia que permitieron ubicar al prófugo, quien había evadido la justicia desde su condena. La comitiva fiscal-policial se trasladó hasta la vivienda indicada, donde se concretó la detención de Flores González y el decomiso de los objetos mencionados. Las autoridades destacaron que la operación se llevó a cabo respetando la dignidad humana del detenido, quien fue puesto bajo custodia segura para cumplir con la pena impuesta.
Hipólito Flores González, de nacionalidad paraguaya, se enfrenta ahora al traslado correspondiente para el cumplimiento de su sentencia, mientras que los indicios incautados serán analizados como parte del proceso judicial en curso. Este operativo refleja el trabajo coordinado entre el Ministerio Público y las fuerzas policiales para hacer cumplir las resoluciones judiciales en casos de alta gravedad.
