Durante la transmisión del Programa Punto Crítico emito por TVS y Studio FM 92.1, en un impactante testimonio, Blanca López, una ciudadana paraguaya que fue detenida en Posadas, Argentina, reveló las difíciles circunstancias que vivieron ella y otros compatriotas durante su retención en una comisaría local. La detención, que se produjo en el estacionamiento de un supermercado, ha generado serias preocupaciones sobre la actuación de las autoridades y el respeto a los derechos humanos.
Según manifiesta, el operativo se desarrolló de manera confusa y alarmante. Los oficiales no se identificaron como policías, lo que llevó a los presentes a pensar que estaban siendo víctimas de un asalto. Tras ser arrestada junto con su vecino, quien también es paraguayo, Blanca relató que todos los detenidos fueron puestos en fila y trasladados a la comisaría, donde las condiciones eran deplorables.
Comentó que los agentes no se identificaron como policías en el momento de la detención, lo que generó confusión y temor, pues inicialmente pensaron que estaban siendo víctimas de un asalto. «Nos pusieron a todos en fila y empezaron a preguntar quiénes tenían documentos paraguayos o argentinos. A los que teníamos documentos paraguayos nos apartaron», expresó López, visiblemente afectada por lo sucedido.
Durante su tiempo de detención, según el relato de López, ella y sus compañeros fueron objeto de un intento de extorsión por parte de un abogado, quien les exigió el pago de 18,000 pesos para ser liberados. «El abogado nos pidió 18,000 pesos y decía que quienes podían pagar, saldrían de inmediato», detalló López, añadiendo que ella misma fue una de las más calmadas del grupo, advirtiendo a sus compañeras que podría tratarse de una emboscada.
Durante su detención, los paraguayos fueron separados de los demás detenidos y les ofrecieron libertad a cambio de dinero, situación que Blanca describe como una emboscada. «Nos dijeron que estábamos libres, pero sin nuestros documentos. Nos negamos a salir, porque no sabíamos adónde iríamos sin ellos», explicó.
Las condiciones en la comisaría eran precarias. Blanca narró cómo una de las mujeres detenidas se desmayó debido al estrés y la falta de asistencia. Además, mencionó que todos estaban engripados debido a la lluvia y el frío, sin acceso a medicamentos, a pesar de que sus familiares intentaron llevarles lo necesario. También expresó su temor ante la posibilidad de ser expulsada de Argentina por 10 años, una amenaza que las autoridades les hicieron para que abandonaran la comisaría sin sus documentos.
Blanca López también señaló la falta de comunicación con el Consulado paraguayo, que inicialmente no estaba al tanto de la situación. Fue solo después de insistir que las autoridades consulares intervinieron, aunque de manera limitada. «El consulado se enteró tarde, y cuando llegó, no podían hacer mucho», lamentó.
A pesar de la difícil situación, Blanca agradeció el buen trato recibido por parte de los policías locales, quienes, según ella, también parecían estar desorientados respecto a la razón de su detención. Sin embargo, la experiencia ha dejado a Blanca y a los otros detenidos profundamente afectados. «Estoy muy asustada, no sé qué pasó ni cómo continúa esto. Es traumático tener problemas en un país extranjero», afirmó.
El caso ha generado preocupación entre los familiares y la comunidad paraguaya, quienes demandan una investigación exhaustiva sobre las circunstancias de la detención y el trato recibido. Se espera que el Consulado paraguayo y las autoridades correspondientes tomen medidas para garantizar que situaciones como esta no vuelvan a repetirse.
