Encarnación atraviesa una preocupante tendencia en el aumento de siniestros viales, que se han convertido en una de las principales causas de atención en los centros asistenciales, tanto públicos como privados. Según datos recientes, estos accidentes representan una carga significativa para los servicios de emergencia.
Los cuerpos de bomberos, cuya función principal debería enfocarse en la atención de incendios, ahora dedican un promedio de 4 a 5 servicios diarios a incidentes de tránsito. Esta cifra se dispara durante los fines de semana, incrementando aún más la presión sobre los recursos humanos y logísticos de estas instituciones.
El panorama pone en evidencia no solo la gravedad de los accidentes viales en la ciudad, sino también la necesidad de fortalecer las estrategias de prevención y educación vial para disminuir los incidentes que afectan a conductores, peatones y motociclistas.
Además, resalta la importancia de reevaluar las prioridades de los servicios de emergencia, ya que el creciente volumen de atenciones por siniestros viales podría impactar en la capacidad de respuesta ante otros tipos de urgencias.
Autoridades locales y organizaciones civiles han instado a redoblar los esfuerzos en campañas de concienciación y controles más rigurosos en puntos críticos de la ciudad, especialmente durante los fines de semana, cuando se registra el mayor número de incidentes.
El aumento de siniestros viales no solo representa un desafío para los servicios de emergencia, sino que también pone en jaque la seguridad vial de Encarnación, requiriendo la acción conjunta de autoridades y ciudadanía para revertir esta alarmante situación.