En el vibrante casco urbano del barrio Quiteria, en la ciudad de Encarnación, Paraguay, se encuentra un lugar mágico que combina naturaleza, educación y turismo: el Mini Zoológico del Colegio Juan XXIII. Este espacio, gestionado con dedicación por la familia Fretes, se ha convertido en un punto destacado del City Tour de Invierno organizado por la Entidad Nacional de Yacyretá, atrayendo a familias, niños y visitantes de todas partes, incluidos turistas de Argentina, que buscan una experiencia única durante las vacaciones de invierno.
Un Refugio para la Fauna Regional
El Mini Zoológico Juan XXIII alberga una impresionante variedad de especies nativas de Paraguay, muchas de las cuales formaban parte de los frondosos bosques que alguna vez cubrieron la región. Entre los residentes más destacados se encuentran el yaguareté, el puma, los tapires y los coloridos guacamayos, como la famosa pareja Romeo y Julieta, que se han convertido en una sensación local. Estos guacamayos, que recorren libremente el centro de Encarnación durante el día, regresan al zoológico para descansar y recibir cuidados, demostrando una conexión especial con este lugar.
El zoológico no solo ofrece la oportunidad de observar de cerca animales que suelen verse solo en fotos o videos, sino que también promueve la conciencia sobre la conservación de estas especies, muchas de las cuales están en peligro crítico o al borde de la extinción. Como señala el profesor Vicky Fretes, encargado del lugar, el objetivo es educar a los visitantes, especialmente a los más jóvenes, sobre la importancia de respetar y proteger el ecosistema.
Una Experiencia Familiar y Educativa
El Mini Zoológico Juan XXIII es mucho más que un simple lugar para ver animales. Es un espacio lleno de vida, donde los olores, los sonidos y el movimiento constante crean una atmósfera inmersiva que cautiva a grandes y chicos. «Hay mucha armonía y distracción», destaca el profesor Fretes, quien subraya que el zoológico ofrece a los niños la oportunidad de conectar con la naturaleza de una manera directa y significativa, alejándolos de las pantallas y acercándolos al mundo natural.
El City Tour de Invierno, que incluye la entrada gratuita al zoológico, es una iniciativa que busca conectar a la comunidad con la historia y los atractivos de Encarnación. Según el licenciado Carlos Bado, del área de turismo cultural de Yacyretá, el recorrido no solo muestra las transformaciones de la ciudad, sino que culmina con la visita a este «lugar mágico» que resalta la riqueza natural de la región. Las salidas se realizan todos los días durante las vacaciones de invierno, a las 9 de la mañana y a las 2 de la tarde, partiendo desde Turista Roga (Ruta 1 y Costanera Bolick).
Compromiso con la Conservación
El Mini Zoológico Juan XXIII es un proyecto sostenido por la familia Fretes y el Colegio Juan XXIII, quienes asumen la responsabilidad de cuidar estas especies para preservarlas para las futuras generaciones. Aunque el profesor Fretes reconoce que lo ideal sería que los animales vivan en total libertad, subraya que aún queda mucho por hacer en términos de educación y compromiso ambiental. «Necesitamos trabajar más con responsabilidad y participación para respetar su derecho a la vida», afirma.
El zoológico está abierto todos los días de 9 a 17 horas, con un costo de acceso de 10,000 guaraníes. Además, está abierto a sugerencias y recomendaciones para mejorar tanto el bienestar de los animales como la experiencia de los visitantes. A pesar de desafíos como las inclemencias del tiempo, el equipo del zoológico se esfuerza por mantener un entorno cuidado y acogedor.
Voces de los Visitantes
Los visitantes, especialmente familias y turistas, no escatiman en elogios. Una familia proveniente de Misiones, Argentina, destacó la belleza del lugar y la variedad de especies, lamentando solo que el espacio podría ser más grande para albergar aún más animales. «Es hermoso, la verdad que no se van a arrepentir», comentaron, invitando a otros a descubrir este tesoro escondido en Encarnación.
Una Invitación Abierta
El Mini Zoológico Juan XXIII no es solo un atractivo turístico, sino un espacio que invita a la reflexión sobre la importancia de proteger nuestro entorno y valorar la biodiversidad. Ya sea como parte del City Tour de Invierno o en una visita independiente, este lugar ofrece una experiencia enriquecedora para todas las edades. Como dice el profesor Fretes, es una oportunidad para «generar conciencia de respeto, aprecio y responsabilidad» hacia la naturaleza.
Si estás en Encarnación o planeas visitar la ciudad, no dejes de incluir el Mini Zoológico Juan XXIII en tu itinerario. Ubicado en el barrio Quiteria, este pequeño refugio de vida silvestre te espera con los brazos abiertos para que descubras la magia de la fauna paraguaya y te sumes al esfuerzo por cuidarla.















