En un mundo donde los obstáculos a menudo parecen insuperables, la historia de Mario Rojas Acosta, un joven paraguayo que pasó de ser limpiador en el Instituto de Previsión Social (IPS) a convertirse en enfermero profesional, es un testimonio de perseverancia, sacrificio y fe en los sueños.
Mario, en un emotivo posteo que se volvió viral, compartió su inspiradora travesía. «Fue sudor, lágrimas, tristezas, ansiedades, bajones, sacrificios. Tener que elegir entre comer hoy o juntar para tu cuota, comer ese postre que te gusta o tener que guardar para tus copias», relató. Sus palabras reflejan las dificultades que enfrentó mientras trabajaba arduamente para costear sus estudios y mantener viva su meta.
El camino no fue fácil. Mario ingresó a la universidad a los 18 años, sin apenas conocimientos previos, y enfrentó dos años de tropiezos que describe como «regalar dinero y tiempo». Sin embargo, en 2019 decidió retomar sus estudios con renovada determinación. La pandemia de 2020 representó un nuevo desafío, pero en 2021, Mario volvió con más fuerza y, desde entonces, no se detuvo hasta alcanzar su objetivo.
«Hoy, después de 9 años, pude llegar a mi tan anhelado sueño», expresó con orgullo. Su mensaje final es un canto a la esperanza y la resiliencia: «Nunca dejen de soñar. Porque si puedes SOÑARLO, puedes LOGRARLO».
La historia de Mario Rojas Acosta no solo celebra su logro personal, sino que inspira a miles de personas a perseverar frente a las adversidades. Desde su humilde trabajo como limpiador hasta el título de enfermero, Mario demuestra que, con esfuerzo y determinación, ningún sueño es inalcanzable.
