Una banda conformada por al menos quince delincuentes fuertemente armados atacó una sucursal del Banco Itaú. El grupo utilizó explosivos de gran potencia para acceder a la bóveda de la entidad bancaria.
Los delincuentes utilizaron armas de fuego de gran calibre, explosivos, clavos miguelitos y otros elementos para llevarse el dinero de la bóveda y los cajeros. Incluso, habrían utilizado un dron para vigilar toda la zona.
Tras concretar el golpe, los delincuentes huyeron a bordo de tres camionetas. Una de ellas, de color oscuro, fue hallada abandonada en la zona de Nueva Esperanza. La Policía Nacional informó que los asaltantes arrojaron clavos tipo “miguelito” sobre la ruta para evitar ser perseguidos.
La fiscal interviniente Cleider Velázquez, explicó que los delincuentes destruyeron por completo la estructura de la sucursal con explosivos. “Vaciaron la bóveda, pero no lograron acceder a los cajeros automáticos. Estamos esperando el resultado del arqueo para determinar el monto exacto del dinero sustraído”. Se solicitó la intervención de especialistas explosivistas de Ciudad del Este y de agentes de la FOPE, quienes inspeccionarán tanto el edificio como los vehículos abandonados por los atacantes.
Vecinos y comerciantes de Katueté describieron escenas de terror durante el asalto. “Quedó un rastro de guerra impresionante. Eran entre 15 y 20 personas y hablaban en portugués. Usaron armas de grueso calibre y tecnología moderna”
La Policía Nacional y el Ministerio Público continúan con el relevamiento de evidencias, recolección de imágenes de cámaras de seguridad y análisis de los restos de explosivos para identificar a los responsables.
