Un hombre que dice llamarse Pedro Giménez, vive hace más de 7 años bajo un árbol, ubicado sobre la avenida Japón de la ciudad de Encarnación. El mismo dice que no tiene ningún familiar a quien recurrir para cambiar su calidad de vida. Incluso cuenta con una herida expuesta en el sector del abdomen.
En cada lluvia extiende una carpa sobre él para evitar mojarse. Sin embargo, el esfuerzo es inútil por la precariedad del lugar. Y su colchón que se encuentra en el suelo se moja y ya no tiene donde dormir.
Su condición de extrema pobreza no le permite realizar un tratamiento médico para su herida. Todos los días mendiga en los semáforos para poder conseguir comer y así sobrevivir el día a día.
