Se trata del tramo de Badaling, que estuvo cerrado durante casi dos meses. Habrá un límite de visitantes diarios y es necesario tener un “código de salud”.

Para obtener un lugar, los visitantes deben hacer una reserva previa en el sitio web oficial o a través de WeChat y registrarse con su información personal para obtener un código de salud.

Además, serán sometidos a una verificación de temperatura corporal en la entrada. Y hay más normas: es obligatorio el uso de barbijo y mantener al menos de dos metros de distancias con los demás.

Para evitar la concentración de multitudes, se ha diseñado una ruta circular de dirección única. Por lo pronto, el teleférico, el Museo de la Gran Muralla y las ruinas antiguas permanecen cerradas.

El tramo de la Gran Muralla de Badaling, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, se encuentra en el distrito de Yanqing de Beijing, a unos 60 kilómetros al noroeste del centro de la ciudad.
Es la sección más popular de la Gran Muralla entre sus visitantes, y recibió más de 9,9 millones de visitantes en 2018.
Fuente: CLARÍN